La consultora MVI Marketing acaba de hacer público el sondeo más completo realizado hasta la fecha en el mercado europeo acerca de la percepción que los clientes tienen sobre la joyería con diamantes creados en laboratorio. Las conclusiones no tienen desperdicio y, de hecho, deshacen algunos mitos como que los consumidores norteamericanos están más abiertos a este producto que los europeos.
El informe es el resultado de un amplio estudio realizado a través de internet con compradores habituales de joyas de Francia, Alemania, España, Italia y el Reino Unido. En total fueron 1530 encuestados (algo más de 300 por país) los que completaron el estudio.
Este estudio, el primero de este tipo, analiza la aceptación, el conocimiento y las opciones de compra del consumidor sobre los diamantes creados en laboratorio en los principales mercados europeos y además lo compara con sondeos anteriores realizados por la consultora en el mercado estadounidense.
Claves del estudio
El primer dato destacado del informe es el alto nivel de conocimiento que los consumidores de Francia, Italia, Alemania, España y Gran Bretaña tienen sobre la existencia de los diamantes sintéticos. El 77% de los usuarios aseguraron que conocían el producto antes de realizar la encuesta. Y eso es apenas un 3% menos del conocimiento de los compradores de EE.UU (80%), donde su introducción es mucho más amplia. (Actualmente, en torno al 50% de la joyería con diamantes sintéticos se vende en aquél país).
Por países destaca el interés de Italia por este producto. Un 86% mostró su conocimiento y aceptación y más del 50% mostró su interés para conocer más sobre este tipo de joyería.
El interés de los consumidores sobre estos diamantes se basa en tres aspectos: Por un lado su menor coste y, por tanto la posibilidad de comprar piedras de mayor tamaños; sus propiedades idénticas a los naturales y, finalmente, la percepción de que se trata de una opción más sostenible y más ecológica. En torno al 26% de los consumidores señalaron estos aspectos como los que más “habían escuchado”.
Según indica la consultora “muchos de los comentarios textuales compartidos en el estudio citaron a los diamantes sintéticos como más ecológicos y sostenibles, causando menos daño al medio ambiente y los recursos naturales que la minería, así como más éticos que los diamantes extraídos”.
Los españoles los prefieren grandes
El sondeo pone además un ejemplo concreto a los participantes en la encuesta, ofreciéndoles la oportunidad de comprar dos diamantes sueltos, uno natural de 1,4 quilates y otro sintético de 1,9 quilates, al mismo precio:
El dato inesperado: Casi el 50% de los clientes en España elegiría el diamante creado en laboratorio de 1,9 quilates, el porcentaje más alto entre los cinco países encuestados, seguido de Italia con un 48%.
Y si se les presentaran dos anillos idénticos, uno engastado con un diamante sintético y el otro minado, pero con un precio de 3.000 y 3.900 euros respectivamente, más de la mitad de los consumidores en tres de los 5 países también elegirían el anillo sintético: Italia (54%), España (53%) y Gran Bretaña (52%).
En cuanto a la tipología de productos el 41% de los consumidores europeos se decanta por la joyería ‘de moda’ y en concreto en forma de collares, aretes y pulseras. Y también otro dato inesperado; el 34% también contemplaría esta opción para la joyería nupcial.
Tras la publicación del informe, Marty Hurwitz, director ejecutivo de THE MVEye, destaca que “Antes de comenzar este estudio, sabíamos que había una conciencia creciente sobre los diamantes creados en laboratorio diamantes en el mercado europeo. Pero no esperábamos el alto nivel de conciencia que señalan los resultados de la investigación”.
