¿Una nueva vida en forma de joya para las mariposas que acaban su ciclo vital? Pues sí, la firma española Hobe acaba de lanzar una interesante propuesta en la que aúna elementos orgánicos con metal para dar forma a unas piezas verdaderamente únicas; tan únicas como lo son las alas de estos fascinantes lepidópteros.
Para comenzar con este proceso su responsable, Ariana Onno, adquiere a un zoo-criadero del Valle del Cauca en Colombia, las mariposas que ya han terminado su ciclo biológico de manera natural.
“Una vez recolectadas las mariposas se procede a la selección de las alas de la manera más respetuosa para comenzar el proceso de creación de la joya” explica Onno.
Posteriormente se cubren de resina y barniz natural inmortalizando las alas, con una base de latón bañado en oro con las que inician su segundo vuelo como una joya, sobre todo enfocadas en pendientes.
“Una colección de magníficos y preciosos pendientes, dónde aquellas mariposas reciben una segunda oportunidad para lucir su esplendor y belleza, realizando así su Segundo Vuelo” apunta la creadora.
