La decisión del Izhakoff se debe a motivos "estrictamente personales" y además ya se había anunciado a mediados de mayo pasado. Había informado a la junta de directores del WDC sobre su intención, en su reunión anual de Vicenza, Italia. La intención era dar tiempo a la convocatoria de elecciones para que la transición se desarrolle con normalidad.
El Consejo Mundial del Diamante se creó de forma oficial (porque ya venía se venía articulando algo similar desde 1997) en el año 2000, principalmente en respuesta a una de las crisis más graves a las que se ha enfrentado esta industria: El enorme flujo de diamantes incontrolados que financiaban conflictos y autócratas locales en la década de los 90 y la siguente.
Al frente del WDC, Izhakoff fue uno de los impulsores del Proceso Kimberley, establecido en la Asamblea General de las Naciones Unidas, y que se convirtió en el órgano 'observador' que implicaba a los países miembros de la ONU, así como a productores, exportadores y otros representantes de la industria y de la administración para poner freno a la sangría en países como Congo, Zimbabwe o Costa de Marfil.
"Ha sido un período difícil a menudo, pero siempre inspirador de mi carrera", apunta Izhakoff . "Nuestra industria, no sólo jugó un papel decisivo en la creación del sistema que bloquea el flujo de diamantes conflictivos en el mercado legal, sino que también cambió la forma en la que vemos nuestro papel como una comunidad de negocios en una sociedad mayor. también cambió modo en que son considerados por nuestros accionistas y consumidores", concluye.