Los asaltantes iban disfrazados de policías y llegaron en un vehiculo oficial y una furgoneta, poco antes de las 20:00 de anteayer, según los guardas de seguridad que custodiaban el transporte de las gemas. Abordaron al piloto y a los empleados que trasladaban las cajas al avión, amenazándoles con armas automáticas y se hicieron con el botín.
El asalto duró menos de 10 minutos y no hubo disparos ni heridos, pero los asaltantes lograron hacerse con 120 paquetes que contenían diamantes en bruto, con destino a la ciudad suiza de Zúrich.
Tras el robo, los encapuchados huyeron rápidamente hacia el noroeste del país, donde horas después se encontró calcinado uno de los vehículos asaltantes.
Los diamantes procedían de Amberes y se estima que el botín robado asciende a 50 millones de dólares, unos 37 millones de euros, según han confirmado desde el Antwerp World Diamond Centre (AWDC), que se ha apresurado a recordar la "alta seguridad" que habitualmente reina en el mercado belga del diamante.
*Acceda a la nota de presa oficial del AWDC, pinchando aquí