El reloj Arceau, diseñado en 1978 por Henri d’Origny, logra conjugar sobriedad y audacia. La forma de su caja redonda con asas asimétricas en forma de estribo tiene un estilo que resulta atemporal y, al mismo tiempo, singular.
El modelo Arceau Petite lune , con su caja de acero con 99 diamantes engastados y una corona rematada por un diamante de talla rosa, plasma en la esfera la ilusión de un eclipse. Un degradado de laca azul dibuja efectos de claroscuro y desvela un centro de color azul abisal orlado con 15 diamantes. Entre brillo y profundidad, esta evocación de la desaparición de un astro luminoso se realza con una elegante fase de luna con su constelación de estrellas.
Finas agujas caladas sobrevuelan ese universo celeste; acompasa el conjunto el movimiento de manufactura Hermès H1837 de cuerda automática, que presenta horas y minutos y tiene las fases de luna situadas a las 10.30. El fondo zafiro de la caja permite admirar los acabados perlados, acaracolados y satinados, así como la decoración con la inicial H que adorna puentes y masa oscilante.
En una nueva demostración del savoir-faire marroquinero de la casa, la correa intercambiable de aligátor azul abisal viste el reloj Arceau Petite lune, enteramente fabricado en los talleres de Hermès Horloger.