Todas las gemas, incluso las piedras preciosas fuera de las tres grandes, tienden a la baja en sus importaciones en noviembre, lo que repercute en su acumulado. En éste, perlas y diamantes incrementan sus descensos que ya llegan al 14,6% en el primer caso y rozan el 6% en el segundo.
En el caso de rubí, zafiro y esmeralda, la fuerte baja de noviembre, cerca de un 67% no trunca aún la evolución del año, con casi un 90% de alza. El resto de piedras preciosas crece anualmente a un ritmo del 56% pese a la baja mensual.