Según la marca, se trata de una colección inspirada en los fondos marinos que busca acercarse a la naturaleza a través de sus texturas orgánicas. Las piezas están realizadas en plata con chapado en oro, a las que incorporan la aventurina, una variedad de cuarzo de color verde intenso.

Collar en plata con cadena barbada chapada en oro de 18 quilates con aventurina: 899 euros.

Brazalete en ébano con plata de ley chapada en oro y cuarzo aventurina: 219 euros.

Un brazalete con los mismos materiales que las piezas anteriores: 629 euros.