Como ya adelantamos hace unos días el pasado fin de semana se subastaba en París un raro ejemplar de pulsera ‘olvidado’ que el artista malagueño utilizó a lo largo de los años 60′ del siglo pasado hasta que se lo regaló a su amiga, la escultora griega Lela Kanellopoulou.
Fallecida la artista griega sus herederos lo sacaron a subasta en Bonhams París con una horquilla inicial muy exigua, entre 12.000 y 18.000 euros, ya que se trataba de una pieza de escaso valor técnico producida alrededor de 1960 por el casi desconocido relojero suizo Michael Z. Berger.
Pero el nombre tira mucho y la modesta cifra de salida «encendió Internet y los teléfonos, y desató una guerra de ofertas que tuvo a todos al límite de sus asientos» explican desde la casa de subastas hasta que el mecanismo cayó bajo el martillo finalmente por 219.050 euros, «entre los aplausos de la sala de ventas» añaden desde Bonhams.
Catherine Yaiche, directora de Bonhams France aseguraba, cómo no, estar «feliz de haber podido abrir nuestro calendario de ventas 2021 en Francia y concluir nuestra venta derribando el mazo de este reloj Picasso extremadamente raro, que combina arte, lujo y la historia de una de las personalidades más famosas del mundo»
El reloj es uno de los tres creados por Berger que llevan el nombre del artista en su esfera plateada, con letras negras que forman los marcadores de hora, como se muestra en muchos retratos de Picasso, aunque se desconoce el paradero de los otros dos ejemplares.
